
Inventario
Si hiciéramos inventario, ¿cuántas posesiones tendríamos? Si contáramos todo aquello al que le anteponemos el pronombre posesivo “mi”, ¿cuánto creeríamos que es nuestro? Cada que
Si hiciéramos inventario, ¿cuántas posesiones tendríamos? Si contáramos todo aquello al que le anteponemos el pronombre posesivo “mi”, ¿cuánto creeríamos que es nuestro? Cada que
No es cuestión de paciencia o de buenas formas. El problema es que no es problema. En lo general, no es problema para gobernantes, de
Calabazas, gatos negros, sombreros puntiagudos, flores de cempasúchil, calaveras, papel de china. No hay duda. Se acaba octubre y empieza noviembre. No es cualquier cosa.
Lejos se ven los tiempos de las manifestaciones en el Zócalo, en la Cámara de Diputados, en la casa presidencial exigiendo el derecho al voto
Así le llamó Ana. Y no pudo haberlo descrito mejor. Porque la tristeza se disfraza a menudo -de enojo, sobre todo-, pero cuando llega desnuda
¿No nos hemos equivocado?, preguntó con sincera preocupación. Tenemos ahora mejores leyes; pero, ¿no deberíamos haber cambiado primero la conciencia social? La reflexión surgió en
No pregunté su nombre, aunque bien podría llamarse Lupita. Y bien podría ser mexicana, aunque en realidad es peruana. Para efectos prácticos da igual, porque
No sé dónde leí que los días lluviosos son, en realidad, buenos días fuera de contexto. Y pensé, bueno, sí, en sitios donde hay una
Cuando llegó me dijo: Ahora yo voy a ser tu hija. Y yo me reí, más por no saber qué decir que porque me causara
Suscríbete para recibir alertas sobre nuevos artículos, eventos, charlas y más actividades
©Copyright 2025 © Todos los derechos reservados, Cecilia Lavalle Torres. Por favor lea nuestro Aviso de Privacidad
Diseño: anamon.studio